La concejala de Políticas Sociales e Igualdad del Ayuntamiento de Hueva, María José Pulido, y la directora territorial de la Fundación Don Bosco, Teresa Borrero, han realizado esta mañana una visita al proyecto Cocina Familiar Comunitaria, que hasta el mes de marzo se imparte en la sede de la Asociación de Vecinos de Los Rosales. Una iniciativa,  fruto de la colaboración de las dos instituciones, dirigida a 12 familias beneficiarias de la ayuda alimentaria de entidades como Resurgir o Banco de Alimentos.

María José Pulido ha destacado que el objetivo de esta iniciativa, que cumple su segunda edición, es el de enseñar a los participantes a elaborar recetas tradicionales y saludables con las que aprovechar al máximo los alimentos que reciben, brindándoles a la vez un espacio de convivencia y de apoyo mutuo, así como un seguimiento de inserción por parte de los técnicos de Don Bosco y los Servicios Sociales Comunitarios.

Según ha explicado Teresa Borrero, la finalidad última del proyecto es empoderar a las familias participantes, dotándolas de las herramientas necesarias para que tengan una alimentación digna y, a la par, trabajando con ellas de forma integral en otros muchos aspectos. Al respecto, ha avanzado que fruto de las acciones formativas realizadas el pasado año, muchas de estas personas consiguieron insertarse laboralmente en la sociedad con un trabajo digno.

El proyecto  ‘Cocina Familiar Comunitaria’, que cuenta una subvención de la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, se puso en marcha a principios de este año como una actuación pionera en la ciudad en materia de inclusión social y laboral. Y va dirigido a las familias de la capital en situación de vulnerabilidad y de riesgo de exclusión, con las que, aprovechando este taller de cocina, se trabaja para mejorar sus competencias personales en formación, autoestima y motivación.

Los beneficiarios de esta segunda edición son 12 familias y un total de 40 personas, que han sido seleccionados por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de diferentes zonas de la capital. Estas familias, por turno, aprenden durante las mañanas a realizar recetas saludables y sencillas, que, una vez elaboradas, distribuyen a todos los beneficiarios a diario para que las coman en casa. Asimismo, se les ofrece una receta y los ingredientes para elaborar la cena, asegurándoles de esta manera un menú sano semanalmente con los alimentos que reciben.